Realizar actividad física es parte fundamental para llevar una vida sana. Ayudarnos a mantener un peso ideal, mantener nuestro corazón y pulmones sanos, reducir el estrés y aumentar la energía, son tan solo algunos de los beneficios que este hábito nos puede traer.
¿Qué es la actividad física?
La actividad física implica todos los movimientos que hacen trabajar los músculos de tal manera que les exige un gasto de energía.
Muchas veces la actividad física es confundida por realizar actividad de alto rendimiento o deportes extremos. No necesitas pasar horas en un gimnasio o ser un deportista profesional para añadir pequeños hábitos a tu día a día que realmente pueden hacer la diferencia.
Es recomendable comenzar a caminar 30 minutos diarios para acostumbrar al cuerpo a la movimiento y después ir añadiendo más actividades que sean de tú agrado.
¿Qué hábitos diarios se pueden modificar?
- Utilizar las escaleras en lugar del elevador.
- Estacionar el automóvil más lejos.
- No estar demasiado tiempo sentados.
- Caminar más y utilizar menos el automóvil.
¿Cómo comenzar a cambiar tu estilo de vida?
La clave está en encontrar alguna actividad que en realidad disfrutes realizar, no es fácil encontrarla si siempre has sido una persona sedentaria, pero valdrá la pena. Recuerda que para cuidar tu salud, es importante también mantener una alimentación balanceada y tomar por lo menos 1 litro de agua diario.
¡Actívate!
