Un osario es un lugar en donde se almacenan huesos humanos. A pesar de lo tenebrosa que puede sonar esta definición, estos lugares han llegado a convertirse en establecimientos llenos de arte.

¿Cómo comenzaron a surgir los osarios?

El origen de los osarios está relacionado con el cristianismo y el deseo de los creyentes de descansar eternamente en tierras sagradas. Ante la gran cantidad de restos humanos que eran enterrados a los alrededores de las iglesias, surgió la necesidad de trasladarlos para poder contar con más espacio y es aquí donde se comenzaron a crear los osarios.

Esta tradición se encuentra relacionada también con otras religiones, como la judía. En las comunidades judías las tumbas contaban con dos secciones; en la primera sección las familias solían envolver el cuerpo de sus seres queridos en una sábana blanca hasta que este se descompusiera y se conservaran solamente los huesos para posteriormente pasarlos a la segunda sección, era ahí en donde los dejaban descansar junto con los restos de otros familiares.

¿Cuáles osarios vale la pena visitar?

Catacumbas de París

El osario con más restos del mundo y actualmente uno de los atractivos turísticos favoritos de los visitantes de la capital francesa. Se origina como respuesta a problemas de salubridad provocados por la gran cantidad de restos en los cementerios de la ciudad. Abrió sus puertas al público en 1809 y actualmente cuenta con 20 metros de profundidad, 2,000 metros de longitud y 243 escalones.

Osario de Brno

Ubicado en Brno, República Checa. Alberga más de 50,000 esqueletos convirtiéndolo en el segundo osario con más restos del mundo. Los estudios antropológicos estiman que entre los restos se encuentran víctimas de la peste y la cólera. Es considerado un lugar conmemorativo y único por lo que personas de todo el mundo asisten a visitarlo, afirmando que la vibra del lugar no se relaciona en lo absoluto con el miedo. Actualmente cada visita puede estar conformada solamente por 20 personas.

Además de la gran historia que tienen estos lugares, el acomodo de estos restos los convierten en grandes obras maestras. ¿Te atreverías a visitarlos?