La importancia de los arrecifes

El arrecife de coral es una montaña formada por esqueletos de coral debajo del agua. Están compuestos por algas y moluscos. 

Los arrecifes son mayormente conocidos por los colores brillantes y por seguir creciendo año con año y ser el hábitat de muchas especies marinas. 

Los corales están compuestos por millones de animales pequeños llamados pólipos. Los pólipos tienen forma de un tubo de aproximadamente 1 pulgada y al final de ese tubo, hay una boca rodeada de tentáculos. 

La forma y tamaño de un coral es muy diverso, tienen diferentes texturas, colores y dimensiones. Algunos pueden ser suaves, otros rígidos, lisos o ásperos. 

La mayoría de los corales viven juntos en grupos llamados colonias. Las colonias muy grandes son llamadas arrecifes. 

Podemos encontrar corales en todo el mundo, pero sobreviven mejor en aguas cálidas. En los océanos tropicales, se forman estructuras muy grandes llamadas atolones.

¿Cuántos tipos de arrecifes hay?

  1. Arrecifes costeros:
    Son los que están ubicados cerca de la costa, generalmente son jóvenes.

  2. Arrecifes de barrera:
    Se encuentran más lejos de la costa y forman una gran pared entre aguas pocas profundas y el mar abierto. El arrecife más largo se encuentra en Australia y mide 2 mil kilómetros de longitud.

     
  3. Los atolones:
    Son los arrecifes en forma de anillo y se crean cuando un volcán viejo hace erupción y se hunde en el mar. 

¿Cuáles son las funciones del coral y del arrecife de coral?

  • Los arrecifes protegen las islas y los continentes de las olas. 
  • Permiten que otras especies prosperen en aguas poco profundas cerca de la costa. 
  • Los corales eliminan y reciclan el dióxido de carbono. 

¿Cuáles son las amenazas clave para los arrecifes de coral?

  • La industria pesquera ha dañado y destruido muchos arrecifes de coral. 
  • La luz solar está bloqueada por los trabajos de tala y construcción cerca de las costas y no permite que ingrese a los arrecifes. 
  • Los fertilizantes y los desechos humanos que son arrojados al océano. 
  • El buceo no responsable puede conducir a la destrucción de arrecifes. 
  • El calentamiento global y las altas temperaturas del agua blanquean los corales y los llevan a su muerte. 

“Proteger las playas, el mar y todo lo que hay en el, es vital para mantener el equilibrio ambiental y que las futuras generaciones puedan disfrutar de la naturaleza”